Luego del cruel homicidio del comerciante Jorge Castaño Castaño en la noche de este jueves en el barrio La Chinita por una supuesta extorsión, los moradores de ese barrio del suroriente de Barranquilla expresaron su temor por la actual situación que se vive y que retoma un problema como la extorsión que ha cobrado la vida de muchas personas debido a que se niegan a pagar las denominadas ‘vacunas’.

En esa noche del jueves ningún morador se esperó que volvieran las muertes por las supuestas extorsiones y que el comerciante reconocido en La Chinita y El Ferry fuera una de las víctimas de este flagelo.

Ante esta situación y por temor a que sigan las muertes, los habitantes escribieron una carta para rechazar este tipo de actos delictivos y pedirle a las autoridades una solución a sus dolores de cabeza.

“Nosotros los habitantes del barrio La Chinita nos toca financiarle los gastos a los señores que se hacen llamar ‘Los Papalopes’ y a  los de ‘El burro’ con pequeñas cuotas y que aumentan si eres dueño de algún negocio. Las casas pagan 2000 pesos y los negocios la cuota varía depende la estructura. Este cobro es realizado todos los domingos por una adolescente, y algunas veces son dos, que no pasan de los 16 años. Ellas manifiestan que vienen buscando la cuota de seguridad haciendo alusión a un papel que tiraron algunos meses diciendo: “Para un barrio más seguro.

Ellas aparecen de un momento a otro, y si no tienes te dicen: “la próxima va doble”. Cobran por algo que no hacen y tenemos que pagar por temor.

Nos da miedo denunciar porque si lo hacemos en cualquier momento te pueden llegar a la puerta para matarte; o si sales a trabajar no regresas, y si vuelves sería en una bolsa, pero primero tu cabeza y luego el resto de tu cuerpo.

La Policía no está ausente en el barrio, pero pareciera que se hicieran los de la vista gorda porque no hacen nada, y el comandante de la Policía niega todo porque según ellos en estos barrios no suceden las extorsiones. Ellos tienen un supuesto puesto de control ubicado en la carrera 15 cerca al megacolegio pero solo vigilan esa parte porque en el resto del barrio sucede de todo.

Pedimos a las autoridades que se apersonen de este dolor de cabeza para nosotros porque poco a poco a punta de vacunas y extorsiones estamos formando un grupo delincuencial y viviremos así siempre con temor a negarse a dar la plata porque nos pueden matar”, son las palabras expresadas por los habitantes del barrio La Chinita en su carta.

Los moradores del barrio esperan que la situación cambie y que la Policía realice los operativos correspondientes para erradicar este problema que seguirá cobrando vidas el día que no paguen las vacunas.